Siempre mostrando las tetas para calentar a su primo

Acostada en el sofá de la casa, donde su padre lee la prensa y su abuelo toma algunas siestas, simula revisar su móvil. Que seguramente si lo está haciendo, ya que se ha vuelto parte de ella y no puede vivir sin tenerlo en la mano. En ese momento aparece su primo, quien sabe que ella no deja de mostrar las tetas para provocarlo a él. Por eso es que se acerca y se pone a tocarla, mientras ella agarra su polla para ponerla dura y luego hacerle una mamada. En ese momento, ambos están listos para una follada por el coño y claro está, es lo que pasa después. Como era de esperarse.