Sus tetas siempre animan a su hijastro

Camina porque ya cansa que todo el mundo diga que hay que hacerlo. Ya negarse es peor y entiende que ha perdido la batalla. Sin embargo, nunca pensó que se encontraría cosas que puede pagar con unos pocos billetes. Y luego de cerrar el trato, se encuentra en su casa degustando el coñito con pelos de la zorrita del parque. La flaquita le muestra su raja y luego se pone a cuatro patas para que este tío pueda meter la polla. Como tradicionalmente se ha hecho y no hay nada nuevo. Pero si muchas cosas buenas que ver. Porque la cerda sabe lo que hace.