La zorra muestra el coño en la calle a cambio de unos billetes

Ya conoce el truco. Ella lo ha pillado muy rápido y no ha necesitado pasar por momento dolorosos. Desde día uno ella ha conseguido que abrir la puerta trasera sea una experiencia gratificante y desde ese momento ya no ha dejado de practicarlo. Porque ya tiene claro que con el culo bien lubricado, se mete cualquier polla. Solo hacen falta unas gotas y ya luego no importa el tamaño porque ella va a gozar la follada anal de cualquier forma. Es un método que le funciona y seguramente con el tiempo necesitara menos lubricación. Porque tendrá el agujero del culo más abierto, pero para eso, seguramente hace falta esperar unos cuantos meses.