A cuatro patas como una perra y no es con su marido

Su esposo sale a trabajar porque el dinero no cae del cielo. Entiende, que si quiere tener a una mujer feliz, debe complacer todos sus caprichos. Algunas veces ni siquiera con eso. Como vemos a hora mismo. Porque esta mujer, aunque es casada, está a cuatro patas como una perra con un tío y no es su marido. Literalmente le está montando los cuernos. Y lo hace con muchas ganas porque parece que no puede conformarse con la misma polla para toda la vida. Entonces sale a buscar la primera que encuentra por cuestiones de variedad. O simplemente es otra puta más. No sabemos.